jueves, octubre 05, 2006

Sören se quedó meditando sobre lo que decían las voces no tan anónimas que transformaban la Nada. ¡Cuántas especulaciones alrededor de la Nada! ¿Principio? ¿Fin? ¿Motor? ¿Color?...

- Esto merece una reunión -se precipitó Sören-. En el lugar de siempre, a la hora de siempre. Tema: la Nada.

El lugar era ese que todos conocían, porque lo frecuentaban siempre cuando la noche y la vida los aproximaba a algún misterio. Lo único que hacía falta era combinar los detalles del lugar pero, como siempre, de eso se encargaría la imaginación de los que se encuentren en ese Instante.

- Si surge algo de esta conversación, seguramente será la comprobación empírica del milagro ex nihilo... Pero, si no... ¡Estos experimentos teórico-prácticos me apasionan!